Tras el 1-0 sufrido en la ida, el Bohemio ganaba 3-0 en su estadio. Cuando llegó el tercer gol, se desataron serios incidentes y los jugadores vistantes se fueron al vestuario.
Un verdadero escándalo fue el partido de vuelta de la final cuyana del Torneo Regional Amateur entre Peñarol y San Martín de Mendoza, ya que cuando iban 28 minutos del segundo tiempo y el Bohemio goleaba 3-0, los jugadores vistantes le hicieron una serie de reclamos al árbitro Juan Carlos Bazán y posteriormente se fueron al vestuario.
El encuentro en el Ramón Pablo Rojas de Chimbas arrancó con Peñarol manejando el juego porque estaba obligado a remontar el 1-0 sufrido en la ida. A los 14 minutos se puso en ventaja a través de Gustavo Pereira y el mismo jugador aumentó la diferencia a los 37′.
La supremacía bohemia continuó en el complemento y a los 26′ Facundo González marcó el 3-0 que desencadenó la furia del Chacarero mendocino. Los jugadores visitantes le hicieron una serie de reclamos y agresiones al árbitro catamarqueño (una supuesta falta en el primer gol y un presunto offside en el segundo), golpearon al colaborador del técnico de Peñarol y decidieron retirarse del campo de juego e irse a los vestuarios en forma de protesta. Y allí, en los camarines, destrozaron todo.
El partido nunca se reanudó y tanto el DT de San Martín como algunos jugadores descargaron su bronca en los medios y apuntaron contra el «mal arbitraje», los dirigentes del equipo sanjuanino y también del Consejo Federal de AFA. Así las cosas, en medio de un escándalo, todo indica que Peñarol ganaría la serie y enfrentará a Independiente de Chivilcoy en búsqueda del ascenso al Torneo Federal A.
