Lo ganaba el Globo de visitante, sin embargo el Canalla reaccionó en el final y retomó la Superliga con una gran victoria 2-1.
Rosario Central se adueñó de un agónico triunfo por 2-1 como local ante Huracán, por la decimoséptima fecha de la Superliga Argentina de Fútbol.
El Canalla empañó así el debut oficial de Israel Damonte como entrenador del elenco de Parque Patricios, que no supo liquidar el partido cuando tuvo la chance y después pagó caro esa falencia.
Las emociones fueron exclusivas del segundo tiempo. Norberto Briasco marcó la diferencia inicial para el Globo, que así rompía una racha de seis partidos sin victorias.
Sin embargo, el uruguayo Sebastián Ribas, con la colaboración involuntaria del arquero paraguayo Antony Silva, alcanzó el empate, y Fabián Rinaudo, en tiempo adicionado, le dio a Central un triunfo valioso, que lo deja a apenas un punto de los líderes del torneo, River y Argentinos.
El Canalla, que contó con el regreso de Marco Ruben, no se llevó por delante a su rival ni mucho menos durante el primer tiempo, pero sí tuvo las aproximaciones más claras de esa mitad inicial.
La más importante fue un intento de Lucas Gamba, que no pudo definir con precisión ante la salida de Silva.
En el segundo capítulo mejoró significativamente el conjunto visitante. Gómez se mostró más inquieto y participativo que en el primer tiempo y participó de cada ataque del Globo, que comenzó a acercarse paulatinamente a Ledesma.
Fue así que a los 16, la pelota le cayó a Briasco en el sector derecho del área, después de un envío pasado desde el costado opuesto, y el jugador de Huracán sacó un buscapié. La suerte hizo el resto, porque la pelota se metió por el segundo palo, sin que nadie la tocara.
El equipo de Damonte intentó manejar los tiempos del juego, mientras que los dirigidos por Diego Cocca tuvieron que salir obligatoriamente a buscar el empate, con pocas ideas.
Ese contexto dejó a Huracán con la chance de aumentar la ventaja. El segundo del Globo lo tuvo Martín Ojeda, pero Ledesma se lució con una gran atajada y Central le hizo pagar muy caro esa apresurada definición.
Es que a los 38, el uruguayo Ribas se elevó a la salida de un tiro libre y conectó de cabeza. La pelota pegó en el travesaño pero luego rebotó en Silva y se metió en el arco para establecer el 1-1.
Diez minutos después, en tiempo adicionado, a Rinaudo se le abrió el camino por el centro de la cancha y probó desde afuera del área, con tanta puntería que la pelota se metió junto al palo izquierdo de Silva.
Central se llevó tres puntos importantísimos no solo por la lucha por los primeros puestos sino para engrosar su promedio y seguir alejándose de la zona de descenso. Huracán, y Damonte, se quedaron con las manos vacías por no definirlo a tiempo.